La carretera federal Santa Rosa – La Barca es una vía de mayor relevancia en todo el estado, asi como por su uso en municipios de la región, su ampliación a cuatro carriles que culminó en el 2014 significo la notable reducción de accidentes mortales que enlutaban a familias enteras.
En muchos tramos de esta carretera de 79 kilómetros, su infraestructura muestra deficiencias críticas, por ejemplo, en las inmediaciones de El Rodeo y El Sacrificio, el mal estado del muro perimetral es evidente y ha causado fuertes accidentes. Otro tramo es en las inmediaciones de la comunidad de Santa Cruz en el municipio de Poncitlán, donde la carpeta asfáltica muestra un deterioro en muros perimetrales y señalética vial.
Otro tramo vial, aunque está a cargo del municipio de Chapala, es en las inmediaciones de la población de Atotonilquillo, ahí la falta de mantenimiento ha causado ponchaduras y accidentes, además de la falta de señalética que ocasiona que transporte de carga pesada invada carriles de aceleramiento o de transporte.
“Desgraciadamente, es una situación que estamos viviendo aquí en esta carretera, pues el abandono que se tienen ha traído consecuencias fatales como accidentes vehiculares, tanto de vehículos privados como de transporte público”, compartió un automovilista que usa la vía a diario para trasladarse a Guadalajara.
“En el caso de la empresa que yo trabajo, tenemos una ruta concesionada de todos los días de Poncitlán a El Salto y pues eso nos lleva a que las unidades, tienen un desgaste mayor y desgraciadamente las cosas no mejoran”, comento un operador de transporte de personal.
Históricamente esta carretera, por la gran cantidad de vehículo de carga y automovilista que la usa para trasladar sus mercancías hacia el centro del país, significo el interés para Gobierno Federal, situación que ha empeorado con desinterés de las administraciones por lo menos en los últimos 5 años.